El Nuevo Nombre del Templo

Basándose en Apocalípsis 2:17, "Al que venciere... le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita escrito un nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe", el clero mormón temprano intentó fraguar un plan de exclusividad en torno al nombre (o piedrecita blanca) recibido en el templo. Continúa y descubrirás la realidad del asunto.

Cuando vamos por primera vez al templo, todos recibimos un nombre nuevo, el que se supone será con el que seremos llamados en la otra vida. Aunque la iglesia no tiene ninguna doctrina específica, por lo menos públicamente, excepto cunado se dice en la ceremonia del templo que el marido va a llamar a la esposa por su nuevo nombre para traerla al Reino Celestial.

A muchos miembros les gusta la idea de recibir un nombre especial, algunos incluso creen que con ese nombre el Padre Celestial los conocía personalmente en la vida premortal. Muchos se desilusionan cuando descubren que su nombre especial no es tan exclusivo o inspirado divinamente. El saber que TODO aquel que pasa por el templo ese mismo día recibe exactamente el mismo nombre. Personalmente recibí el "nuevo nombre" correspondiente al día que asistí a recibir mis investiduras, de haber ido un día antes o uno después, hoy me llamaría diferente. Eso no suena a que es algo mues especial.

Ese mismo día me sellé con mi esposa, y de igual forma, otras dos parejas de amigos del barrio se sellaron también. Todos recibimos por primera vez nuestras investiduras, y como es obvio, todos recibimos el mismo nombre, los dos hermanos y yo somos "tocayos celestiales", así como mi esposa y las esposas de ellos los son también. Esto está completamente comprobado, no es una "leyenda urbana" como alguien alguna vez me dijo, sino que es un hecho probado.

No existe una seguridad sobre la función o propósito del nuevo nombre. Algunos líderes osados dicen que es el mismo nombre que teníamos en la pre existencia terrenal, y que es con el que se nos reconocerá en la otra vida. Debido a que casi todos los nombres del templo provienen del canon mormón (se han añadido unos pocos no bíblicos como Emma, Hyrum, etc), por lo que el número de nombres es reducido, tal vez no más de unos pocos cientos de nombres más o menos. Si todos serán reconocidos con esos nombres en la resurrección, literalmente habrán millones de Abraham, Ruth, Nefi, Enós, etc... Eso va a ser muy raro.

Podríamos imaginarnos al maestro de escuela dominical en una clase durante el milenio diciendo: ¿Hermano Enós, podría recitarnos el primer artículo de fe?, e inmediatamente escuchar al unísono a decenas o cientos de Enós recitar en coro el artículo de fe solicitado.

También podríamos preguntarnos ¿si es cierto que el nuevo nombre es el mismo que teníamos en la vida premortal, entonces por arte de magia TODOS los del MISMO nombre van al templo en esta vida exactamente el MISMO DÍA

De un ex obrero del templo:

Serví como obrero del velo por un año mientras estaba en BYU. Todos los días antes de que comenzara nuestro cambio, teníamos una breve reunión de instrucción y luego se alzaba una pequeña cartulina con los nombres de ese "día"; un nombre femenino y uno masculino. Creo que hay cerca de 50 nombres para cada sexo que se van rotando. Los nombres masculinos son casi todos bíblicos además de Hyrum usado en buena medida. Puesto que hay menos nombres femeninos en las escrituras, se usan más nombres de mormones tempranos como Emma. Si el primer nombre del iniciado o patrón tiene el mismo nombre de ese día, su nuevo nombre por defecto será Adán o Eva; Esto asegura que el "nuevo nombre" de todo el mundo no sea el mismo que su "nombre propio."

El marido tiene que guardar un secreto de su esposa

Una cosa que traen consigo los nombres especiales es que pueden ser ofensivos hacia las mujeres, debido a que ellas deben decirlo a sus maridos (durante la ceremonia de investiduras, al pasar a través del velo cuando el marido figura como "el Señor", la mujer debe decir su nombre para entrar); sin embargo, a los hombres no se les permite decirles a sus propias esposas el nombre especial que recibieron. 

Esto puede sonar un poco machista. No hay ninguna razón especifica para esta situación, por lo que muchas mujeres suelen sentirse molestas o inconformes por esto. Algunas mujeres podrían incluso sentirse menos importantes, desiguales, excluidas o discriminadas por esta causa.

Debemos preguntarnos por que Dios forzaría a los hombres a mantener ese secreto de sus esposas. Es bien sabido que los secretos entre las parejas casadas no son saludables, especialmente entre recién casados. 

La ceremonia de investiduras como tal tiene cierto dejo de parcialidad (machismo) en favor de los hombres. Si al hecho de que el esposo haga convenios de obedecer a Dios y la esposa de obedecer al esposo le sumamos que tengan que mantener un secreto entre ellos, sería ubicar a la pareja en una situación de desigualdad que no fortalece su relación, sino que podría debilitarla.

¿Se reciclan los nombres del templo?

Cada vez son más las historias de que los nombres del templo están siendo reciclados. Muchas personas han informado que los iniciados en el templo están realizando las investiduras para las mismas personas varias veces, inclusive en familisearch.org hay una opción en la que una persona puede filtrar a sus familiares a quienes se les hayan duplicado las ordenanzas y luego unificar los datos. Algunas personas han reportado ésto como errores normales, mientras que otros afirman que a veces los templo se quedan sin nombres y sólo utilizan los mismos nombres nuevamente para que los que asisten al templo tengan por quien hacer las ordenanzas.

En mi Estaca, luego de anunciarse la construcción de un templo en mi ciudad, continuamente se presionaba a los miembros para que trajeran datos de familiares fallecidos si queríamos que construyeran el templo, obligando casi a que cada miembro llevara un nombre mensualmente (como si la iglesia se fuera a permitir la vergüenza de que luego que el profeta anunciara un templo este no se construyera). Debido a tal presión psicológica, algunos miembros se sentían culpables por no encontrar más datos que aportar, una hermana inclusive  me dijo: "yo ya he realizado la obra por mi familia hasta la cuarta generación, y no tengo más datos que aportar, ¿acaso los líderes esperan que matemos a nuestros familiares para que tengamos datos que entregar?".

Independientemente de la razón, parece que la ceremonia del templo no es realmente para los muertos, sino para los vivos. Si algunas de las ceremonias no tienen ningún sentido, puesto que ya han sido hechas en favor de aquellas personas fallecidas, entonces, la ceremonia es simplemente "trabajo pesado" para los miembros, y no tiene ningún valor para los difuntos.

Me puedo imaginar que sería bastante decepcionante para alguien que llevara cinco horas haciendo una sesión en templo sólo para enterarse de que se les acabaron los nombres válidos. Por lo que puedo entender la razón de que los templos a veces deban reciclar nombres, pero eso no cambia el hecho de que los muertos no se benefician en absoluto al recibir las ordenanzas a su favor por 2ª, 3ª, 4ª o 5ª vez.

Más información: Experiencia de un ex obrero del templo