El Sexo en la Biblia - Primera parte

Es muy típico escuchar que la Biblia es la fuente de la moralidad actual, sin embargo quienes así lo creen desconocen o pasan por alto, ya sea de forma consciente o no, la cantidad enorme de ejemplos sobre la forma en que el sexo es visto en dicho libro, donde queda bien claro que su concepto de sexualidad obedecía a estándares muy diferentes a los nuestros, ubicándolo bien lejos de ser nuestro referente de moralidad sexual. 

El concepto de moralidad sexual en la actualidad, para ser más objetivos y no imponer culturas y creencias particulares, debe ser entendido a través de una óptica relativa, pues lo que para algunos pueden ser buenas costumbres, para otros, en un contexto cultural, religioso, económico, etc., diferente, podría ser todo lo contrario.

En nuestro estudio sobre el concepto antiguo del sexo debemos entender primero que los escritores bíblicos estaban fuertemente influidos por su entorno, y las adaptaciones que realizaron a los mitos aceptados de su época, representan el punto de vista de la sociedad antigua sobre el sexo, uno que era completamente diferente al que nos han hecho creer quienes se han adueñado de la instrucción moral de la sociedad actual. Por este motivo, considero que no es la Biblia la fuente idónea para basarnos a la hora de establecer los conceptos de moralidad en la sociedad actual, sino que debemos buscar esa base en el mismo lugar en el que podemos encontrar la gran mayoría de las respuestas benéficas para nuestra sociedad, en la razón.

Analicemos algunos ejemplos claros del sexo contado en la Biblia. El siguiente no pretende ser un estudio completo por la carencia de espacio, pero creo que es una buena fuente de análisis y un gran empujón hacia un estudio más profundo y concienzudo.

Adán y Eva: ¿moralidad sexual o "machismo original"?

Tal parece que la relación de los "primeros padres" en el mito de la creación fue ganando prominencia como concepto estándar de la sexualidad aceptada, cuando luego de ser creados "varón y hembra", se les manda: "sean fructíferos y multiplíquense", en un claro empuje hacia las relaciones sexuales humanas. 

Para el lector bíblico es claro que a pesar de que el mandato primordial fue destinado hacia los primeros padres, algo apenas lógico al saber que eran las únicas personas en la tierra, las prácticas antiguas fueron tomando destinos diferentes a los planteados inicialmente, y dada la notoriedad y prominencia de los personajes que protagonizaron esos actos, se pueden entender como conductas normales aceptadas socialmente, y mejor aún, dentro del ámbito religioso, que no estaba separado del primero.

Existe una fuerte conexión entre la mitología relacionada a la creación de la especie humana, y su subsecuente desobediencia a Dios, con la sexualidad, donde luego de recibir la orden de fructificar y multiplicarse, Adán y Eva entran en el conocido "pecado original", donde el hombre es seducido por la mujer luego de que ésta prueba las delicias del "fruto prohibido", y después de haber sucumbido ambos, descubrieron su desnudez y empezaron a avergonzarse de ella. El castigo que les fue otorgado definió la organización social del mundo antiguo, y el de muchos países y mentes actuales: el hombre trabaja y la mujer cría hijos y obedece al esposo.

"16 A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti.
17 Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida.
18 Espinos y cardos te producirá, y comerás plantas del campo.
19 Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás." [1]

 Luego de la expulsión del Edén, Eva casi desaparece de los relatos, excepto solo para decir que Adán la "conoció" (otra forma de decir que tuvieron relaciones sexuales) y ella dio a luz sus hijos. 

Sodoma y Gomorra: ¿pecado de homosexualidad o falta de hospitalidad? 

Comúnmente se dice que el "gran pecado" de las ciudades de Sodoma y Gomorra, y que les acarreo una destrucción por fuego, fue el de la homosexualidad, al intentar éstos practicar relaciones sexuales de ese tipo con los visitantes en la casa de Lot, lo que ha sido causa de que el nombre Sodoma (sodomía o sodomita) sea asociado con dicha condición humana. Sin embargo, una lectura y un análisis más detallado de la situación nos revela la realidad del suceso.

Cuenta el relato bíblico que a la caída de la tarde llegaron a Sodoma dos "ángeles" y encontrando a Lot en la puerta de la ciudad, éste les invitó a su casa y les ofreció las comodidades comunes que la costumbre oriental fijaba hacia los forasteros. Entonces veamos que prosigue según la misma Biblia:

4 Pero antes que se acostasen, rodearon la casa los hombres de la ciudad, los varones de Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más viejo.
5 Y llamaron a Lot, y le dijeron: ¿Dónde están los varones que vinieron a ti esta noche? Sácalos, para que los conozcamos.
6 Entonces Lot salió a ellos a la puerta, y cerró la puerta tras sí,
7 y dijo: Os ruego, hermanos míos, que no hagáis tal maldad.
8 He aquí ahora yo tengo dos hijas que no han conocido varón; os las sacaré fuera, y haced de ellas como bien os pareciere; solamente que a estos varones no hagáis nada, pues que vinieron a la sombra de mi tejado.
9 Y ellos respondieron: Quita allá; y añadieron: Vino este extraño para habitar entre nosotros, ¿y habrá de erigirse en juez? Ahora te haremos más mal que a ellos. Y hacían gran violencia al varón, a Lot, y se acercaron para romper la puerta. [2]

Luego esto dos "ángeles" dejan ciegos a los sodomitas y hacen que Lot salga de la ciudad a toda prisa con su familia y escapen así de la destrucción que vendría.

Ahora bien, cualquier lector de la Biblia con un sesgo cristiano o sectario podría entender esta historia como una de homosexualidad, y dicha interpretación se entendería completamente. Pero si queremos entender la realidad del "gran pecado" de Sodoma y Gomorra, debemos ser más cautos y menos prejuiciosos para llegar al meollo del asunto.

El uso de la palabra "conozcamos" obviamente tiene un tinte sexual, y dado que quienes demandaban tal cosa eran "los hombres de la ciudad, los varones de Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más viejo", es claro que sería una relación de carácter homosexual, sin embargo, parece ser que la "maldad" no radicaba en la relación como tal, sino en que este era un acto obligado a través de la violencia, en otras palabras, era una violación sexual a unos forasteros a quienes, según las costumbres orientales, se les debía un trato amable y ventajoso. Una lectura de Ezequiel y los sucesos en el Libro de Jaser pueden corroborar la situación de estos pueblos con relación a los visitantes.

En el libro de Ezequiel leemos:

49 He aquí que esta fue la maldad de Sodoma tu hermana: soberbia, saciedad de pan, y abundancia de ociosidad tuvieron ella y sus hijas; y no fortaleció la mano del afligido y del menesteroso.
50 Y se llenaron de soberbia, e hicieron abominación delante de mí, y cuando lo vi las quité. [3]

Y en el Libro de Jaser:

25 Y un hombre pobre vino a la ciudad para buscar sostén, y él permaneció en la ciudad por algunos días, y toda la gente de Sedom casaron una proclamación de su costumbre de no dar a este hombre un bocado de pan para comer, y él cayó muerto en la tierra, y así hicieron. 26 Y Paltit la hija de Lot vio a este hombre tirado en las calles famélico con hambre, y nadie le daba nada para mantenerlo vivo, y él estaba casi a punto de muerte. 27 Y su alma fue llena de piedad por causa de este hombre, y ella lo alimentó secretamente por muchos días, y el alma de este hombre fue revivida. 28 Porque ella fue a buscar agua y ella puso el pan en la vasija del agua, y cuando ella vino al lugar donde estaba el hombre pobre, ella sacó el pan de la vasija y lo dio a él para comer; así hizo por muchos días. 29 Y toda la gente de Sedom y Amora (Sodoma y Gomorra) estaban pensativos acerca de este hombre , ¿cómo podía soportar la inanición por tantos días? 30 Y ellos se dijeron uno al otro: Esto sólo puede ser que él come y bebe, porque ningún hombre puede soportar la inanición por tantos días o vivir como lo ha hecho este hombre, sin siquiera su semblante cambiar; y tres hombres se escondieron en el lugar donde el hombre estaba estacionado, para saber quien era el que le traía pan para comer. 31 Y Paltit la hija de Lot salió esa día a buscar agua, y ella puso pan en la vasija de agua, y fue a sacar agua por el lugar del hombre pobre, y ella tomó el pan de la vasija y lo dio al hombre pobre y él lo comió. 32 Y los tres hombres vieron lo que Paltit hizo al hombre pobre, y ellos dijeron a ella: Eres tú entonces quien lo ha sostenido y, por lo tanto, él no se ha muerto de hambre, ni ha cambiado su apariencia ni muerto como el resto. 33 Y los tres hombres salieron del lugar donde estaban escondidos, y ellos agarraron a Paltit y el pan que estaba en las manos del hombre pobre. 34 Y ellos agarraron a Paltit y le llevaron delante de sus jueces, y dijeron a ellos: Así hizo ella, y es ella quien ha suplido al hombre con pan, por lo tanto, él no murió en todo este tiempo, ahora decláranos el castigo debido a esta mujer por haber transgredido nuestra ley. 35 Y la gente de Sedom y Amora agitaron un fuego en la calle de la ciudad, y ellos cogieron a la mujer y la echaron en el fuego y ella fue quemada hasta las cenizas. 36 Y en la ciudad de Admah había una mujer a la cual le hicieron lo mismo. 37 Porque un viajante vino a la ciudad de Admah para quedarse toda la noche, con la intención de ir a casa en la mañana, y él se sentó frente a la puerta de la casa del padre de la joven, para permanecer allí, según el sol se puso cuando llegó a ese lugar, y la joven lo vio sentado por la puerta de la casa. 38 Y él le pidió un trago de agua, y ella dijo a él: ¿Quién eres tú? Y él dijo a ella: Yo estaba este día yendo por el camino, y llegué aquí cuando el sol se puso, así que me quedaré aquí toda la noche, y en la mañana yo me levantaré temprano y continuaré mi viaje. 39 Y la joven fue dentro de la casa y buscó pan y agua para que el hombre comiera y bebiera. 40 Y este asunto se hizo conocido para la gente de Admah, y ellos se reunieron y trajeron a la joven delante de los jueces para que ellos la juzgaran por este acto. 41 Y los jueces dijeron: El juicio de muerte tiene que ser pasado sobre esta mujer, porque ella transgredió nuestra ley, y esta es por lo tanto la decisión referente a ella. 42 Y la gente de esas ciudades se reunieron y trajeron a la joven, y la ungieron con miel de cabeza a pies, como el juez había decretado, y la pusieron delante de un enjambre de abejas que estaba en sus panales, y las abejas volaron sobre ella y la picaron de tal manera que su cuerpo estaba todo hinchado. 43 Y la joven gritaba por causa de las abejas, pero nadie tomó nota ni la compadeció, y sus gritos ascendieron al cielo. 44 Y YAHWEH fue provocado por esto y todas las obras de las ciudades de Sedom, porque ellos tenían abundancia de comida, y tenían tranquilidad entre ellos, y aun no querían sostener al pobre y necesitado y en aquellos días sus obras malvadas y pecados se hicieron grandes delante de YAHWEH. 45 Y YAHWEH envió por dos de los malajim que habían venido a la casa de Avraham, para destruir Sedom y sus ciudades. [4]

Como se puede observar, el pecado de Sodoma y Gomorra en contra de Jehová no fue la homosexualidad, sino el actuar de mala forma para con los forasteros y necesitados, el no moverse a misericordia con el menesteroso y el intentar usar la violencia sexual con los visitantes ilustres de Lot.

Es de vital importancia que veamos la respuesta de Lot ante el intento de los sodomitas por violar a sus visitantes, que si bien es cierto demostraría su concepto elevado de la hospitalidad oriental, también comprobaría la poca importancia de la mujer en la misma sociedad. Sus palabras, "yo tengo dos hijas que no han conocido varón; os las sacaré fuera, y haced de ellas como bien os pareciere; solamente que a estos varones no hagáis nada, pues que vinieron a la sombra de mi tejado", es una fuerte prueba de este punto. 

Por tal motivo, contrario a que el relato de la destrucción de Sodoma y Gomorra sea el de una sociedad impregnada de homosexualidad, es una de un pueblo sumido en la maldad para con sus semejantes que usaba la violencia sexual como arma, y además, el de una sociedad que veía a la mujer como un objeto que podía ser usado para saciar el deseo de dicha violencia.

Es así que el hecho de tener relaciones homosexuales no era el problema, sino la violación sexual a la que pretendían someter a unos extranjeros, pues hasta pareciera que la violación a la mujer era mantenida como de poca importancia.

Lot y sus hijas: Incesto a través del engaño

Luego del suceso en el que los ángeles sacan de la mano a Lot y su familia, con la recomendación de no "mirar atrás", éste huye con su esposa e hijas hacia una ciudad llamada Zoar, "la pequeña", pero durante el viaje y movida por la curiosidad, la esposa de Lot mira hacia atrás y se convierte en una estatua de sal. 

Después de esto, el texto bíblico narra una historia de incesto que, por el calibre de los protagonistas y el silencio que guarda el texto en cuanto a juicio y castigo, se podría entender que no era un asunto mal visto desde el punto de vista moral de la época.

30 Pero Lot subió de Zoar y moró en el monte, y sus dos hijas con él; porque tuvo miedo de quedarse en Zoar, y habitó en una cueva él y sus dos hijas.
31 Entonces la mayor dijo a la menor: Nuestro padre es viejo, y no queda varón en la tierra que entre a nosotras conforme a la costumbre de toda la tierra.
32 Ven, demos a beber vino a nuestro padre, y durmamos con él, y conservaremos de nuestro padre descendencia.
33 Y dieron a beber vino a su padre aquella noche, y entró la mayor, y durmió con su padre; mas él no sintió cuándo se acostó ella, ni cuándo se levantó.
34 El día siguiente, dijo la mayor a la menor: He aquí, yo dormí la noche pasada con mi padre; démosle a beber vino también esta noche, y entra y duerme con él, para que conservemos de nuestro padre descendencia.
35 Y dieron a beber vino a su padre también aquella noche, y se levantó la menor, y durmió con él; pero él no echó de ver cuándo se acostó ella, ni cuándo se levantó.
36 Y las dos hijas de Lot concibieron de su padre.
37 Y dio a luz la mayor un hijo, y llamó su nombre Moab, el cual es padre de los moabitas hasta hoy.38 La menor también dio a luz un hijo, y llamó su nombre Ben-ammi, el cual es padre de los amonitas hasta hoy.

Vemos pues que la relación incestuosa, a pesar de no haber sido consentida por Lot, tampoco es puesta en el contexto de "pecado" en el texto bíblico, pues al parecer las hijas de éste creyeron que no habría más hombre en la tierra luego de la destrucción de las ciudades de la llanura, sin embargo no me explico la razón de tal creencia dado que ellos iban a refugiarse en Zoar, una ciudad que, aunque "pequeña", debía tener una buena cantidad de hombres en ella.

Cualquier lector objetivo encontraría serias dudas en el relato, como por ejemplo el hecho de que Lot no sintiera la presencia de sus hijas en su lecho, y mucho menos que no hubiese participado del coito en las dos oportunidades. En todo caso, la forma en que las hijas de Lot usaron el alcohol para organizar una estrategia y poder así concebir de su padre, deja en muy mala posición cualquier pretensión de que la Biblia es la fuente de la moralidad actual, cuando guarda silencio de juicio ante tal suceso.

Espere...
Sara y Abraham, Rubén y la concubina de su Padre, Judá y su nuera, Levítico, La mujer violada y desmembrada, David y Jonatan, y muchos otros más.

Notas:

1 - Génesis 3: 16-19

2 - Génesis 19: 4-9

3 - Ezequiel 16:49-50

4 - El Libro de Jaser, 19: 25-45