Libres de Fe (Manipulada): La Caja de Piedra de José

De acuerdo a las afirmaciones mormonas, el registro dorado o "planchas de oro" fue hallado dentro de una caja de piedra junto con otras reliquias antiguas. Sin embargo, a pesar de que, según la iglesia, estas reliquias fueron devueltas a Moroni, la caja de piedra en la que fueron encontradas, en teoría, debería estar en el mismo sitio donde Smith la encontró, Pero, ¿Que sucedió con dicha caja?

Traducción directa de MormoThink por su servidor

De LDS.org:

“Cerca de la aldea de Manchester, condado de Ontario, estado de Nueva York, se levanta una colina de tamaño regular, y la más elevada de todas las de la comarca. Por el costado occidental del cerro, no lejos de la cima, debajo de una piedra de buen tamaño, yacían las planchas, depositadas en una caja de piedra. En el centro, y por la parte superior, esta piedra era gruesa y redonda, pero más delgada hacia los extremos; de modo que se podía ver la parte céntrica sobre la superficie del suelo, mientras que alrededor de la orilla estaba cubierta de tierra.

“Habiendo quitado la tierra, conseguí una palanca que logré introducir debajo de la orilla de la piedra, y con un ligero esfuerzo la levanté. Miré dentro de la caja, y efectivamente vi allí las planchas, el Urim y Tumim y el pectoral, como lo había dicho el mensajero. La caja en que se hallaban estaba hecha de piedras, colocadas en una especie de cemento. En el fondo de la caja había dos piedras puestas transversalmente, y sobre estas descansaban las planchas y los otros objetos que las acompañaban.

"El Testimonio del Profeta José Smith", Libro de Mormón.

Descripción de la caja de piedra

Por Oliver Cowdery:

Seguiré siendo específico en cuanto a la manera como las planchas estaban depositadas:

En primer lugar, se excavó un agujero de una profundidad suficiente (dicha profundidad no la sé). En la parte inferior se colocó una piedra de gran tamaño la cual tenía una superficie suave. En cada esquina fue colocada gran cantidad de cemento y dentro de este cemento, en las cuatro esquinas de esta piedra, fueron colocadas erguidamente otras cuatro, el asiento de las esquinas descansaban en el cemento en los bordes de la primera piedra. Las últimas cuatro, al estar colocadas erguidamente, formaban una caja, y en las esquinas, o donde las esquinas de las cuatro se ponían en contacto, estaban cementadas tan firmemente que la humedad del exterior no penetraba. Es necesario observar también que la superficie de las cuatro piedras erguidas eran suaves. Esta caja era lo suficientemente grande para guardar pectorales, como los que se usaron en la antigüedad para proteger el pecho de las flechas del enemigo. De la parte inferior de la caja o del pectoral, se elevaban tres pilares compuestos de la misma descripción del cemento usado en las esquinas, y sobre estos tres pilares estaba colocado el registro de los hijos de José, y de la gente que salió de la torre, mucho antes de los días de José, o un bosquejo de cada uno. ¡Si no hubiera sido por esto, y la bondad infinita de Dios, nosotros hubiéramos perecido en nuestros pecados, habiendo sido abandonados por arrodillarnos ante los altares de los gentiles y por dar homenaje a los sacerdotes de Baal!

No se me debe olvidar decir que esta caja que contenía el registro estaba cubierta con otra piedra, la superficie de abajo siendo plana y la de arriba coronaba. Pero estos tres pilares no eran tan largos lo cual evitaba que las planchas y la piedra que coronaba estuviesen en contacto. Ya les he dicho, según mi promesa, la manera en que estaba depositado este registro, aunque cuando fue visitado por nuestro hermano por primera vez en 1823 una parte de la piedra que coronaba estaba visible arriba de la superficie mientras que los bordes estaban tapados por tierra y hierba, por lo cual usted verá que a pesar de la profundidad de la caja que había colocado Moroni la primera vez, el tiempo que paso fue suficiente para gastar la tierra y de esta manera se descubriera fácilmente al ser divinamente dirigido, aunque no era tan visible para los que pasaban por ahí. Cuan maravillosas son las obras del Altísimo, y tan lejos de entender sus caminos, que aquel que toma su nombre en sus labios, y se le permite ver sus grandes maravillas y el cumplimiento de sus propósitos en el cumplimiento de los tiempos y estaciones, tiembla. Si él hubiera encontrado la piedra escondida descrita arriba algunos años antes, nuestro hermano se habría desanimado de intentar hacer otro esfuerzo para obtener este rico tesoro por miedo al descubrimiento. Algunos pocos años después hubieran dejado la caja sin tapa, sus contenidos valiosos expuestos a los rudos cálculos y vanas especulaciones de aquellos que no comprendían ni el lenguaje común ni tenían temor de Dios. Pero tales eventos hubieran sido contrarios a las palabras de los antiguos y a las promesas hechas a ellos. Por eso me quedo admirado de las palabras y por ver la sabiduría de los diseños del Señor en todas las cosas manifestadas a los ojos del mundo: los que muestran que todas las invenciones se evaporan mientras su palabra dura para siempre al igual que sus promesas hasta la última generación.

Latter Day Saints' Messenger and Advocate, 3 vols. (publicado 1834-1837). (Se puede leer la carta completa de Oliver Cowdery a W.W. Phelps en español aquí)

Nota del Editor: Oliver Cowdery no afirmó nunca haber visto la caja de piedra. Él sólo volvió a contar lo que José le dijo. Esto es evidente por el hecho de que Oliver dijo "Sólo me comprometo a dar una descripción del lugar en el momento en que los registros se encontraron en 1823". Oliver, por supuesto, según los informes, no se reunió con José Smith sino hasta 1829, pero las planchas fueron entregadas por José en 1827. También dijo que no visitó la zona [del cerro Cumorah] hasta 1830.

Del The Orators Mormons, informe de 1832 de una interacción con los misioneros mormones:

... Allí, en un costado de una colina, se encontraban en una caja de piedra, o en un espacio cuadrado cerrado con piedra por todos lados, las planchas en las que estaban escritas las revelaciones. El espesor de la caja era de aproximadamente 6 pulgadas, y de alrededor de 7 por 5 en el otro lado... así asegurada por anillos de plata o lazos en la caja como una defensa eficaz contra todo tipo de clima...

The Orators Mormons," Catholic Telegraph (Cincinnati, Ohio) 1 (14 de abril 1832): 204-5 Reimpresión de Mercer Press (Pennsylvania), alrededor de abril de 1832.

De Una Disertación Sobre el Sueño de Nabucodonosor:

Un agujero de suficiente profundidad fue excavado, y una piedra plana estaba colocada en la parte inferior; entonces habían cuatro conjuntos erigidos en los bordes exteriores de la piedra inferior, unidos entre sí con algún tipo de cemento, a fin de formar una caja. En la parte inferior de piedra estaba colocado un escudo o coraza, desde el que surgían tres pilares de cemento. En la parte superior de estos pilares estaba el registro, junto con el "Urim y Tumim", el conjunto no se extendía bastante parejo con la parte superior de las piedras laterales. Todo el conjunto tenía puesto una piedra de coronación, una pequeña parte era visible, cuando visitó por primera vez el sitio.

W.I. Appleby, Una Disertación Sobre el Sueño de Nabucodonosor... (Filadelfia: Brown, Bicking y Guilbert, 1844), 1-24.

¿Existían relatos de otras cajas de piedra?

Algunos miembros de la Iglesia creen que los nefitas escondieron numerosas cajas de piedra en la zona de Palmyra, los cuales creían que contenían algún tipo de tesoro, pero que en realidad nunca se recuperaron cualquiera de estas cajas, aunque algunas historias siguen siendo de aventuras - ya sean reales o imaginarias.

Había un relato de Ole A. Jensen afirmando que Martín Harris primero afirmó su testimonio del Libro de Mormón y después retransmitió un relato donde Martín fue a buscar tesoros y afirmó haber encontrado otra caja de piedra.

Nota: Esta no es la caja de piedra de la que según los informes salieron las planchas de oro, sino una caja de piedra diferente que Martín afirma que encontró en la colina Cumorah. Aunque esta historia no tiene nada que ver con la caja de piedra donde supuestamente estaban escondidas las planchas de oro, se incluye ya que la crítica y los fieles mormones se refieren a esta historia para aportar pruebas paralelas de la caja de piedra que guardaba las planchas de oro.

Las siguientes citas provienen de la página web promotora de la fe El Testimonio del Libro de Mormón de Martín Harris. (énfasis añadido)

El hermano Harris luego se giró como si no tuviera nada más que decir y nos alistamos para salir. Él habló de nuevo y dijo: "Les diré lo más maravilloso que sucedió, después de que José recibió las planchas. Tres de nosotros, yo y dos más, tomamos algunas herramientas y fuimos a la colina a excavar en busca de más planchas de oro o algo parecido y de hecho nos encontramos con una caja de piedra. Llegamos bastante excitados y excavamos alrededor de ella con mucho cuidado y justo cuando íbamos a levantarla fuera del agujero, un poder invisible la depositó de nuevo en la colina. Nos pusimos de pie y observamos mientras uno de nosotros trajo una barra de hierro a través de la tapa para sostenerla, pero la barra de hierro rebotó en la esquina de la tapa y se astilló.

Si alguna vez encuentran, y se encontrará, una caja con una de las esquinas de la tapa rota, se sabrá que yo he dicho la verdad...

Firmado como testigos:

Clarkston Utah

julio de 1875

OLE A. JENSEN

JAMES JOSEPH KEEP

JOHN GODFREY

Ole A. Jensen, "Testimonio Dado a Ole A. Jensen por Martin Harris," Julio 1875,3, archivos, Departamento Histórico, Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Salt Lake City (en adelante, los archivos LDS);citados en Dan Vogel, Early Mormons Documents 2: 376.

También, según Brigham Young con respecto a este mismo encuentro:

A veces me tomo la libertad de hablar un poco más con respecto a tales cosas. Orin P. Rockwell es un testigo de algunos poderes de la eliminación de tesoros de la tierra. Estaba con ciertas personas que vivían cerca de donde se encontraron las planchas que contienen los registros del Libro de Mormón. Había un gran número de tesoros escondidos por los nefitas. Porter estuvo con ellos una noche buscando tesoros, y ellos pudieron encontrarlos bastante fácil, pero no pudieron obtenerlos.

Voy a contar una historia que será maravillosa para la mayoría de ustedes. Me ha sido contada por Porter, a quien yo le creería tan rápido como cualquier hombre que vive. Cuando el dice una cosa que él cree, dirá algo que él sabe; él es un hombre que no miente. Dijo que en esta noche, cuando se dedicaban a la búsqueda de este antiguo tesoro, cavaron alrededor del extremo de un pecho al menos unas veinte pulgadas. El pectoral era de unos tres pies cuadrados. Un hombre que estaba determinado a obtener el contenido de ese pectoral, tomó su pico y golpeó en la tapa del mismo, y se quebró con el pectoral. El golpe quitó un trozo de la tapa, que cierta dama mantuvo en su poder hasta que murió. El dinero del pectoral fue al banco. Porter lo describió de manera [haciendo un sonido retumbante]; él dice que esto es tan cierto como lo son los cielos. He oído a otros contar la misma historia. Les cuento esto porque es maravilloso para ustedes. Pero para aquellos que entienden estas cosas, no es maravilloso.

Brigham Young, Diario de Discursos, 19:37

Comentario Editor: Noten en la narración de Ole Jensen, que Martin está contando un incidente en el que, Porter Rockwell y otro (tal vez José Smith), participaron en una excavación de tesoros en Cumorah "después de que José hubo recibido las planchas", ellos estaban buscando "más planchas de oro o algo parecido" y se encontraron con "una caja de piedra". Si hubiese sido la misma que tenía las planchas originales, habría dicho "la" caja de piedra. Por lo tanto, cualquiera que sea la caja de piedra se llamó la atención a que no era la caja que contenía las planchas de oro, sino otra caja de piedra supuestamente enterrada en Cumorah. Estas historias sirven para mostrar la mentalidad mágica de los miembros de la Iglesia. Creer en este relato de la caja de piedra de Martín Harris significa que tenemos que aceptar que la caja de piedra se movió debajo de la tierra para evitar ser capturada. Algo poco creíble pero característico de otros cuentos increíbles contados por Martín

Las aventuras de la búsqueda de tesoros de José Smith entran en detalles de cómo fue empleado por los busca tesoros para encontrar los mismos usando su piedra vidente, pero parecía siempre tener una excusa de por qué no podía realmente encontrar el tesoro a pesar de que lo veía en su piedra. A menudo, José diría que el tesoro se hundía más en el suelo mientras cavaban o que los espíritus de indios muertos custodiaban el tesoro y no dejaban que nadie lo obtuviese o que dijo mal las palabras y arruinó el encantamiento, etc.

¿ Hay piezas de cajas de piedra que yacen en el fondo del cerro Cumorah?

No hay relatos fiables de primera mano de lo que ocurrió con la caja de piedra después de que José sacara su contenido. Aquí está un relato de un libro publicado en 1893. En una serie de entrevistas al escritor Mormón llamado Edward Stevenson, quien estaba familiarizado con José Smith, relata lo que le fue dicho por un "viejo" que vivía cerca del cerro de Cumorah:

Interrogándolo estrechamente declaró que había visto algunas piedras planas de buen tamaño que habían rodado hacia abajo y se encontraba cerca de la parte inferior de la colina. Esto ocurrió después de que el contenido de la caja había sido retirado y estas piedras eran indudablemente las que antes componían la caja. Sentí un fuerte deseo de ver estas antiguas reliquias y le dije que iba a estar mucho más contento de tener su informe de que fueron encontrados. Indicó que desde hace mucho tiempo habían sido retiradas.

Reminiscencias de José, el profeta y la salida a luz del Libro de Mormón por el pastor Edward Stevenson, 1893 Salt Lake City, Utah.

De los libros de Entrevistas de David Whitmer:

Tres veces [David Whitmer] ha estado en el cerro Cumorah y ha visto el cofre que contenía las planchas y la piedra vidente. Finalmente, el cofre se ha deslizado hasta el pie de la colina, pero esto fue la última vez que visitó el lugar histórico.

[Salt Lake Herald (12 de agosto 1875); reimpresión del Chicago Times (7 de agosto 1875); citado en Ebbie L.V. Richardson, " David Whitmer: Un testigo de la Autenticidad Divina del Libro de Mormón" (tesis de maestría, Universidad Brigham Young, 1952), 156-58. También en Lyndon Cook (editor), David Whitmer Entrevistas: Un Testigo Restauración (Orem, Utah: Grandin Books, 1991), 7.]

Editor de comentarios: David Whitmer puede haberse referido a la caja de piedra como un "cofre", como los que algunos nativos americanos comúnmente usaban para enterrar a sus muertos en tumbas o cajas de piedra. Fotos aquí. No llegó a ver la caja de piedra, pero es probable que sólo le fue contada la misma historia por José ya que Whitmer por primera vez escuchó de José Smith y las planchas de oro en 1828, pero las planchas fueron retiradas por José en 1827. Tampoco José afirmó nunca que la caja de piedra se le mostró a alguien.

Las piedras en la parte inferior de la colina estarían allí probablemente cuando posteriormente el propietario, Randall Robinson, os sus herederos araban el terreno.

Un vecino de José trata de encontrar evidencia de la caja de piedra

Lorenzo Saunders, un vecino de los Smith y alguien que conocía a José bastante bien desde que era un muchacho, dio declaraciones sobre José Smith y sus reclamos. En su declaración de 1885, Saunders dijo (énfasis añadido):

Después de [que] se fue de la casa, mi madre dijo que José Smith era un mentiroso; que cada palabra que decía era mentira; Yo sé que él miente porque se ve muy culpable; él no puede ver directo a los ojos; cómo se atreve [a] decir una mentira como esa. El tiempo que afirmó haber tomado las planchas de la colina fue a los 22 días de septiembre de 1827, y yo [y los demás] fuimos el siguiente domingo y los siguiente cinco o seis después y buscamos en la colina al lado del camino [es decir, "en una patrón de búsqueda"] y no pudimos encontrar ningún lugar donde la tierra había sido removida. Había un gran agujero donde los buscadores de dinero habían cavado un año o dos antes, pero no tenía tierra fresca. Nunca hubo tal agujero; nunca hubieron ningunas planchas sacadas de esa colina ni ninguna otra colina en el país encontradas en el condado de Wayne. Es todo una mentira. No, señor, nunca vio las planchas ni nadie más lo hizo. Tenía una vieja caja de cristal [es decir, una caja usada para guardar platos o cristales de vidrio] con una baldosa en ella, de unos 7 x 8 pulgadas, que era las supuestas planchas de oro [;] y Martín Harris en ese momento no sabía que las planchas de oro eran un ladrillo.

Lorenzo Saunders, Carta a Thomas Gregg 28 de enero de 1885, Charles A. Shook, The True Origins of the Book of Mormon (Cincinnati, Ohio: Standard Publishing Co., 1914, p 134-35.). Citado en: Dan Vogel, ed,. Early Mormons Documents, 3 vols. (Salt Lake City: Signature Books, 1996-2000, 3: 177-79.

Edmund L. Kelley , en1884 entrevistó a Lorenzo Saunders (énfasis añadido):

Y José dijo que vio al ángel de nuevo; El ángel le dijo que debía ir y conseguir una esposa y entonces él podría llevar a su esposa y así obtener las planchas. Y fingió que debía conseguir un caballo negro o una mula para ir y obtener las planchas [.] Fuimos allí y analizamos la colina en todo sitio en el que afirmaba que estaban las planchas y no pudimos encontrar un sólo lugar que estuviera en ruinas y donde hubieran habido planchas en el suelo, donde no se removió la colina. Robinson dijo que trató muchas veces de encontrar el agujero de donde las sacó, es decir en la colina al oeste donde fue limpiado [.]

Dan Vogel, Early Mormons Documents, vol. 2, Salt Lake City: Libros de la firma, pp 159-60..

Excavaciones en el cerro Cumorah

Tal vez aún más importante que las declaraciones de Lorenzo Saunders acerca de no poder encontrar evidencias de un agujero recién excavado una semana después de que José afirmó haber retirado las planchas, es la declaración del mismo Saunders de que ya estaba cavado en el lado este de la colina Cumorah. Ahí es de donde muchos asumen que procedían las planchas.

Eber D. Howe en su libro Mormonism Unvailed declaró:

En el transcurso del tiempo muchos pozos fueron cavados en el barrio, que fueron posteriormente señalados como el lugar de donde las planchas fueron extraídas.

Mormonism Unvailed, Eber D. Howe, pp. 12-13.

Dan Vogel discute las excavaciones en el cerro Cumorah:

Sin duda la más importante de las misiones del tesoro de Smith se produjo en una colina prominente, ahora conocida como el "cerro Cumorah," situado en el lado este de la carretera de Canandaigua en el cuadrante noroeste de Manchester Lote 85, en ese entonces parte de la granja de Randall Robinson. Ciertamente el descubrimiento de las planchas de oro en 1823 y las actividades posteriores sobre la colina de Smith se produjeron en un contexto de búsquedas de tesoros. De particular interés es la afirmación de que Smith y sus amigos excavaron en esa colina en algún momento antes de que Smith retirara las planchas el 22 de septiembre de 1827.

Un no identificado residente de Manchester, dijo que "'la Colina Mormona' había sido designada por largo tiempo como el lugar en el que innumerables tesoros fueron enterrados / Joseph, padre, había 'paleado' hasta más de un pie de la ladera de la colina para encontrarlos, y José hijo, en más de una ocasión lo acompañó". En 1880, Frederick G. Mather dijo, "Volviendo a las proximidades de Palmyra [de Pennsylvania], Smith y sus seguidores comenzaron a excavar en busca de las planchas en el lado oriental de la colina." Mather conecta esta excavación con los acontecimientos del 22 de septiembre de 1827, pero cinco años más tarde Lorenzo Saunders corrige las citas de Mather. Saunders, que visitó la colina en cuestión los días posteriores al retiro de las planchas de Smith, dijo que no encontró ninguna remoción en la tierra, excepto "un gran agujero" que había sido excavado por los "buscadores de tesoro" alrededor de "un año o dos antes". En agosto de 1831, James Gordon Bennett señaló que en la "Colina de la Biblia... Hay un agujero de 30 o 40 pies de diámetro en un costado -de 6 pies de diámetro". La existencia de este agujero en el lado noreste de la colina en 1867 fue verificada por Pomeroy Tucker, quien dijo que la excavación estaba "parcialmente visible aún", y por Edward Stevenson, quien informó haber visto el agujero en 1871. Los primeros residentes de Palmyra/Manchester confundieron el noreste de esta excavación como la ubicación del depósito de las planchas, que Oliver Cowdery dijo más tarde que estaban "en el lado oeste de la colina, no muy lejos de la parte de arriba hacia abajo."

Cualquiera que fuera la naturaleza de la participación de José Smith con los buscadores de tesoro en la colina, tanto la ubicación como el momento de la excavación sugieren al menos una conexión indirecta con Smith. Sin embargo, la declaración de Martín Harris de que Smith no se separó de los buscadores de tesoro hasta después de haber obtenido las planchas indica una participación más directa. Por otra parte, la sugerencia de que los buscadores de tesoro compañeros de Smith habían excavado previamente en la colina explica por qué más tarde creían que tenían derecho a las planchas y trataron de quitárselas a Smith. Según Joseph Knight, al menos uno de los amigos buscadores de tesoros de Smith, Samuel F. Lawrence, quien también era un vidente, "tenía conocimiento sobre la colina y sabía de las cosas que había allí y estaba tratando de obtenerlas." Willard Chase también dijo que Lawrence había estado en la colina con Smith en 1825 y había visto las planchas con su piedra, pero que Smith dijo más tarde que Lawrence había dado la ubicación incorrecta.

Después de su matrimonio el 18 de enero 1827 en Bainbridge, José y Emma Smith fueron a Manchester y residieron en la casa de los Smith hasta su expulsión a Harmony, Pensilvania, en diciembre. Durante esta estancia en Manchester, José Smith se dedicaba a actividades de búsqueda de tesoro antes de obtener las planchas en septiembre. Tanto Martín Harris como Lorenzo Saunders aseguraron que Smith llevó una empresa de excavación de tesoros hasta el momento en que recibió las planchas de oro; Harris afirmó específicamente que Josías Stowell visitaba a los Smith en Manchester "cavando en busca de dinero" cuando José tomó las planchas de la colina.

Joseph Capron, que vivía al sur de los Smith en Manchester Lote 1, informó que José hijo, usando una piedra en su sombrero, había localizado "un cofre de relojes de oro... al noroeste de mi casa", y que en 1827 una compañía de buscadores de dinero, dirigidos por Samuel F. Lawrence, intentaron desenterrar el tesoro. La granja de Capron estaba situada en la parte más al sur de Manchester Lote 1, y posiblemente la excavación se produjo en el lado oeste de Stafford Road.

"The Locations of Joseph Smith's Early Treasure Quests," Dialogue: A Journal of Mormon Thought 27 (3): 209-213 pg, Dan Vogel

W.W. Phelps también confirmó las excavaciones:

Los lugares en los que [Smith y Harris] excavaron por las planchas, en Manchester, se pueden ver.

Mormonism Unvailed, Eber D. Howe, 273.

Comentario del Editor: Si José, efectivamente, buscó tesoros por años en el cerro Cumorah antes de retirar las planchas de oro de allí, se crea un conflicto con la historia de José de haber recibido instrucciones del ángel Moroni para desenterrar las planchas de oro de la caja de piedra. Esto demuestra que José realmente estuvo excavando tesoros en la colina Cumorah "un año o dos antes de que" sacara las planchas y tal vez hasta el mismo momento en que José dice que retiró las planchas de la colina el 22 de septiembre de 1827. ¿Por qué José estuvo excavando tesoros en la colina Cumorah (o en cualquier lugar para el caso) después de que el ángel le dijo que "no debía tener otro objetivo a la vista al obtener las planchas, sino el de glorificar a Dios, y no debía ser influenciado por cualquier otro motivo que el de edificar su reino; de lo contrario no podría obtenerlas"?

José se habría reunido con el ángel Moroni, en el mismo lugar donde la caja de piedra estaba enterrada, cada 22 de septiembre, desde 1823 hasta 1827. Después de haber estado en el lugar exacto en cinco ocasiones en más de cuatro años, José sabría exactamente dónde estaban enterradas las planchas, así que por qué iba a excavar en otros lugares en la misma colina para encontrar tesoros ocultos cuando le fue prohibido tomar tesoros como lo informó? Esto habría sido en el tiempo entre la primera conversación de José con el ángel y cuando se retiraron las planchas de la colina, una actividad que difícilmente Moroni habría aprobado.

Comentarios de la Crítica

Foto del Montículo de Gravois Bluffs

Hoy en día no hay ninguna evidencia tangible para las planchas del Libro de Mormón, el pectoral y el Urim y Tumim que José Smith dijo que había encontrado en una caja de piedra en la colina Cumorah. Al parecer, fueron devueltos al ángel Moroni o a una cueva secreta oculta en el interior del cerro Cumorah. Pero, ¿y la caja de piedra que contenía estos elementos sagrados? Nunca fue informado por José que algo le sucedió a la caja de piedra original, ¿por qué no hay evidencia de que existía?

Según José, la caja de piedra era una colección de piedras formadas en una forma cuadrada o rectangular que tenía algún tipo de cemento entre las piedras a fin de formar una cámara sellada. Esto no suena como nada especial o sagrado. ¿Por qué esta caja de piedra no ha sido mostrada a todo el mundo? No habría sido una prueba sólida de la civilización nefita, o de cómo José o sus asociados podrían haber construido fácilmente un recinto de piedra en la colina Cumorah. Los nativos americanos hicieron cámaras funerarias de piedra como ésta desde hace siglos.

Sin embargo, no hay recuento confiable de que cualquier persona (que no fuera José Smith) en realidad vio la caja de piedra que guardaba las planchas de oro y otras reliquias nefitas. Los dos relatos de testigos que afirmaron haber visto las piedras en la parte inferior de la colina son sospechosos, ya que sólo presumen que éstas habían venido de la caja de piedra de Moroni. El primer relato publicado en 1893 ni siquiera da el nombre de la persona que supuestamente le dijo a Edward Stevenson que encontró unas piedras planas en la parte inferior de la colina que se "supone" vinieron de la caja de piedra. Esta narración de una historia a partir de un "viejo" desconocido es dudosa en el mejor de los casos.

La segunda historia, se informó en el Times de Chicago en 1875, afirmando que David Whitmer vio el cofre tres veces. Esto es sospechoso por un par de razones 1) No hay relatos que indiquen que David vio el cofre una sola vez, y mucho menos tres veces como se ha indicado. 2) La "piedra vidente" en cuestión era la piedra que se encontró en la propiedad de Mason Chase que José utilizó para traducir el Libro de Mormón pero no era la versión de "anteojos" del Urim y Tumim que estaban en la caja de piedra. Si el reportero confundió estos detalles, también pudo haber confundido otros detalles.

Nota: Por favor, véase también la sección de MormonThink sobre los Testigos del Libro de Mormón . [En este sitio (Libres de Fe) ha sido traducida esta sección al Español en 6 partes, ver aquí: parte 1, parte 2, parte 3, parte 4, parte 5 y parte 6]

¿Arrastrándose en la colina?

El "cofre" (Caja de piedra) aparentemente conservó los elementos firmes por 1.400 años después de que Moroni los escondiera allí en el siglo 5 ¿por qué, de repente, la caja se arrastraría hacia abajo de la colina? ¿Cómo podría incluso pasar eso? La caja era lo suficientemente grande como para contener un pectoral, las planchas de oro y el Urim Tumim y, según el relato de Cowdery, habían "pilares de cemento" elevando las planchas de oro por encima del pectoral. Una estimación modesta daría a las dimensiones interiores de la caja de piedra alrededor de 20" de ancho x 30" de largo por 16" de alto. Además, aumentaría el tamaño del espesor de las piedras que componen la caja y el cemento para unir las piedras. Tal vez el tamaño de la misma es lo que hizo que le dieran el término "cofre [o ataúd]". José mismo dijo que la piedra angular era de "un tamaño considerable", lo que lo obligó a usar una palanca para mover la piedra. Incluso la ilustración mormona de este evento muestra una piedra superior que debía pesar por lo menos 100 libras o más.

La caja estaba enterrada bajo tierra (que de acuerdo con Cowdery fue construida bajo tierra) a excepción de la piedra angular superior. Se podría suponer que la caja entera habría sido relativamente pesada. En primer lugar, ¿Cómo podría estar esta caja en sí misma fuera de la tierra y entonces de alguna manera encontrarse en la parte inferior de la colina? Una caja de piedra pesada, de forma cuadrada, simplemente no se va a escurrir por una colina como si fueran guijarros.

En pocas palabras, si la caja de piedra sobrevivió 1.400 años en el suelo, entonces todavía habría estado allí décadas después de que José extrajo el contenido. ¿A donde se fue?

Nunca ha sido encontrado el agujero de la caja de piedra.

Incluso si la caja de piedra de alguna manera fue destruida y las piedras fueron retiradas, habría quedado un agujero grande en donde ésta estaba. Sin embargo, tenga en cuenta las palabras del vecino de José, Lorenzo Saunders, como se mencionó anteriormente:

El tiempo que afirmó haber tomado las planchas de la colina fue a los 22 días de septiembre de 1827, y yo [y los demás] fuimos el siguiente domingo y los siguiente cinco o seis después y buscamos en la colina al lado del camino [es decir, "en una patrón de búsqueda"] y no pudimos encontrar ningún lugar donde la tierra había sido removida. Había un gran agujero donde los buscadores de dinero habían cavado un año o dos antes, pero no tenía tierra fresca. Nunca hubo tal agujero; nunca hubieron ningunas planchas sacadas de esa colina ni ninguna otra colina en el país, encontradas en el condado de Wayne. Es todo una mentira. No, señor, nunca vio las planchas ni nadie más lo hizo. Tenía una vieja caja de cristal [es decir, una caja usada para guardar platos o cristales de vidrio] con una baldosa en ella, de unos 7 x 8 pulgadas, que era las supuestas planchas de oro [;] y Martín Harris en ese momento no sabía que las planchas de oro eran un ladrillo.

Fuimos allí y analizamos la colina en todo sitio en el que afirmaba que estaban las planchas y no pudimos encontrar un sólo lugar que estuviera en ruinas y donde hubieran habido planchas en el suelo, donde no se removió la colina. Robinson dijo que trató muchas veces de encontrar el agujero de donde las sacó, es decir en la colina al oeste donde fue limpiado[.]

Esos relatos de Lorenzo Saunders parecen más fiables ya que tenemos una fecha exacta y también afirma haber ido allí con varias personas, incluyendo uno llamado Robinson. Lorenzo y su equipo debieron poder encontrar un agujero recién excavado si la caja de piedra había sido removida. Si no había sido removida, entonces la caja de piedra habría sido perfectamente encontrada ese día en algún momento en el futuro, o todavía estarían allí ahora. Por supuesto, con todas las personas que han visitado la colina desde entonces, es inconcebible que todavía estén allí hoy.

Conclusión

Las evidencias físicas de la existencia del Libro de Mormón que se podrían utilizar para demostrar que ha sido un tema real y tangible ya no existen, incluyendo la caja de piedra en la que supuestamente estaba almacenado. Una teoría es que no sólo las planchas de oro fueron tomadas por Moroni nuevamente, sino que la caja de piedra también lo fue. Sin embargo, alguna evidencia física (facsímiles y papiros) de otro libro que José Smith afirmó traducir como el Libro de Abraham, están todavía en esta tierra. Si los fragmentos de estos antiguos escritos sagrados no fueron llevados de vuelta al cielo, entonces ¿por qué iba alguien a pensar que una caja de piedra habría sido retirada de la tierra cuando no son tan importantes o proporcionarían casi la confirmación física de las afirmaciones históricas de la Iglesia con los facsímiles y papiros del Libro de Abraham?

La existencia confirmada de la caja de piedra garantizaría al menos un poco más de sustancia a los reclamos de José, aunque todavía no sea suficiente para probar dichos reclamos. Nunca hubo ninguna declaración de José de que la caja de piedra (y el agujero en el que estaba) fue retirado por el ángel, por lo que la evidencia de ello debería haber permanecido y habría sido descubierta, pero nunca lo fue, lo que hace que sea probable que la caja de piedra nunca existió, lo que a su vez lleva a creer que las planchas de oro nunca existieron.